viernes, 15 de agosto de 2008

El sonido...

En uno de esos raptos de soledad que una tiene en la noche, cuando se aparta de la reunión y observa desde un rincón, enciende un cigarrillo y fija la mirada en nada...el rockero se acerca, se hace el timidón, pero está totalmente seguro de lo que va a hacer, su ego está agigantado por la reciente tocata.(Y si le preguntás, igual te va a decir que no le gustó como tocó). Y pregunta: "¿Cómo estuvo el sonido?"
PERRRRDÓONNN!
¿Tengo cara de sonidista? NO
¿Tengo cara de entender algo de sonido? NO
¿Tengo cara de haber prestado atención a los bajos? NO
Si te digo mi más sincera opinión, ¿me vas a dar la razón? NO
¿Qué sonido? El de la banda o el PIIIIIIIII que hay en mis oídos?

Hay una respuesta comodín que casi siempre los deja contentos: "al principio másomenos, pero después bien."
Lo que sí descubrí es que el sonido va mejorando proporcionalmente a la cantidad de alcohol que una va ingiriendo.

No hay comentarios: